domingo, 27 de septiembre de 2015

Mama

83 cumpleaños de mi madre






Como todos los años desde que hago galletas....







En agosto y para el cumpleaños de mi madre, yo le hago sus galletas preferidas, los tulipanes.

Siempre son 7, uno por cada hijo, y siempre distintos, claro, porque tanto ella como yo, vamos cambiando con el paso de los años.






Esta vez, los tulipanes fueron rojos, de glasa, con los sépalos en fondant verde y un ligero tono dorado





También hice otras galletas, como estos imprimibles de rosas













O estas sencillas galletas que me cautivaron y no las decoré más porque me parecieron perfectas en su sencillez.






Los tulipanes simbolizan muchas cosas, pero sobretodo para mi, significan el profundo Amor que nos tenemos, aunque a veces la convivencia sea difícil, porque con las preocupaciones diarias, sé que no me permito tiempo para el descanso y para dedicárselo más a menudo. 





   Mi querida madre, te veo cada día más viejecita, más consumida y más llena de dolores y sé que el tiempo apremia y solo quiero poner mi cabeza entre tus manos y que me consueles de tanta pérdida y de tantas penas.





                                        


Pero a veces confundo entre quien es la madre y quien la hija, y en este momento de tu vida, tu necesitas todos mis cuidados y mi cariño y a veces no sé como hacerlo para que te llegue.
Por eso te hago tulipanes el mes de agosto, en tu cumpleaños, porque es una de las pocas formas que yo tengo de decirte cuanto te quiero mamá.























viernes, 18 de septiembre de 2015

Lemon curd

Lemon curd II

(o la mejor crema de limón  que he probado)


 

                                         


   Soy una adicta al lemon curd, no lo puedo evitar, desde que lo probé  me encantó.





       Ya hace un tiempo, intenté hacerlo  aquí y no me salió mal, estaba rico, pero cometí el error de darle vueltas con un batidor de metal y al final quedaba un regusto a ese material que la verdad, desmerecia un poco la receta.





     Como me gusta tanto esta crema, he procurado, por todos los medios no hacerla, porque no debo probar nada de dulce.





    Es complicado, pero cuando vi la receta en el blog de Alma, me dije, voy a probar, solo un poquito...




    Y claro, al final, la hice, ( aunque sólo la mitad) y el resultado aquí lo teneis, es una crema suave, con un color fantástico, con 4 ingredientes y se hace en sólo 10 minutos.






   No me enrollo mas y os dejo la receta. Ya os dije que yo hice la mitad  y la puse en estos tarritos supermonos que me regaló Inma y que son la ración perfecta para el desayuno ( dos cucharaditas).



                             



Ingredientes

- El zumo de 3 limones
- 6 yemas de  huevo, tamaño normal
- 150 de azúcar blanquilla
- 125 gramos de mantequilla normal en dados ( da igual que esté en el frigo, porque luego se disuelve con la crema caliente)






Preparación


Ponemos en un cazo, las yemas, el azúcar y el zumo de limón y batimos hasta integrar, luego llevamos la preparación a baño maria y revolvemos durante 8 minutos con una cuchara de palo (importante!! ) .
Removemos constantemente para que no se peque y nunca debe hervir.

Sacamos la preparación del baño maria (queda con la consistencia de una crema) y entonces es cuando añadimos la mantequilla a dados y removemos hasta que se funda.

Ponemos el lemon curd en un tarro y lo tapamos con papel film para que no haga costra y dejamos enfriar. Metemos en el frigo y una vez frio, ya se puede utilizar.






Esta crema es superdeliciosa!! y la podeis utilizar para rellenar macarons ( los podeis haceis con las claras que os han quedado),con pasteles, como relleno... aunque a mi me gusta en el desayuno, encima de una tostada con queso tipo philadelphia o mascarpone o simplemente como si fuese una riquísima mermelada.

Hacerlal cuesta 10 minutos y ya nunca más la comprareis . Buenísima.

Ahora os dejo practicar y si os apetece, cuando la hagais, me enviais una foto y la publicaré.

Hasta entonces, sed felices.

Bss

domingo, 13 de septiembre de 2015

Misses

Misses 










Tengo una amiga, compañera de trabajo, se llama Yolanda y es una de las personas más encantadoras que conozco.






   Se presentaba al concurso de Mrs. mas de 30, concurso de mises, a nivel regional y había sido preseleccionada para la gala final.





Yo no conocía absolutamente nada de este mundillo, pero siempre me ha parecido fascinante, lástima que cuando era joven nunca me dió por presentarme y ahora, la verdad es que una ya no tiene el cuerpo para muchos trotes, jajaja!





  Las misses se tenian que hacer un regalito, entre ellas y a la organización y Yolanda pensó que unas galletas mias podrían ser algo original.

  Como es amiga, me pareció estupendo hacérselas, pero necesitaba algo bonito, elegante y poco visto, claro.



                    



   Después de muchas pruebas y algún que otro "problemilla", con los colores y galletas que se rompian... pude encontrar el equilibrio perfecto y pensando el ella, me salieron estos vestidos de fiesta, con el cuerpo en fondant, pintado a mano y el vestido el glasa con estarcido y un leve perlado que le aporta brillo.




La parte de arriba le hice pecho,en relieve, que ya tenía yo ganas de probar lo que aprendí en el curso del año pasado con Maribel Rios.









Los vestidos van con la banda blanca en el hombro derecho y con el logo del concurso arriba, aunque no lo he puesto en estas fotos.

  También encontré una caja de flores preciosa donde las puse, que creo que le iba genial.

Todavía no sé cual fué el resultado, pero seguro que cuando esto se publique, ya os podré decir como quedó Yolanda , aunque a mi me da igual el resultado, porque ella es preciosa por dentro y por fuera  y  solo espero que no se le borre nunca esa sonrisa maravillosa que tiene y lo buena gente que es.




De todas formas, suerte!!!!

Bss

martes, 8 de septiembre de 2015

Vacaciones

Vacaciones en Alicante






    He elegido esta foto, en concreto porque es de Tabarca, la isla que está muy cerca de Santa Pola , donde pasamos nuestras primeras vacaciones este verano y que me enamoró.
Hay lugares en el mundo donde, sin saber poqué, te quedarias para siempre,es como si hubieses vivido allí antes y la tierra te llamase... pués eso sentí en Tabarca.



Pero vamos a comenzar por el principio.






   Junio es un buen mes para irse de vacaciones y eso es lo que hicimos este año. 
Por circunstancias familiares, nuestra semanita fué en Santa Pola, Alicante, muy cerca de Benidorm, y ya no me gustó mucho  el tema, porque hace años fuí allí y la verdad es que había tantísima gente  y tanto guiri descontrolado que prometí que jamás volvería

  Así que no me marché con muchas ganas, la verdad. 






La primera sorpresa fué el pueblo, Santa Pola, que tiene un playa magnífica y bien cuidada.




Ejemmmm, esto también ayudó bastante!










Hemos pasado unas vacaciones estupendas y os cuento. Aparte de relajarme muchísimo, ( que ya lo necesitaba ) ,visitamos Alicante y casualmente estaban en fiestas de San Juan, así que habia mucho ambiente y pudimos ver un magnífico desfile con los preciosos trajes alicantinos.

Ahí las llaman Las Hogueras, lo que en Valencia son las Fallas, y había alguna muy muy chula.







También me gustó mucho la cantidad de bares, restaurantes, gastropubs..... todos ellos puestos con mucho encanto y el paseo marítimo, lleno de palmeras es espectacular.













Fuimos a pasar la tarde y fué genial.





Este restaurante de sushi tenia unas pintas espectaculares.





Santa Pola es una población que tiene también mucho encanto, el castillo con unos museos bonitos y cuidados, baratísimos (no llegaban a 2 euros la entrada), el puerto, con una zona de ocio y retauración que me gustó y un bar al lado de la playa con camas!!





Esto forma parte de uno de los museos.








No pude evitar hacerle una foto a la enorme cama dentro del bar con vistas a la playa.









Cenamos en el puerto, pescado recién cogido y también habia puestecitos donde podías comprarlo.






    Otro de los dias , me fuí con mi hija a ver Rio Safari, aunque no soy mucho de zoos, pero este tiene el encanto de ser uno de los primeros en España y cuenta con una pareja de leones albinos, algo muy raro y muy especial.
También tenía una estupenda piscina a la que podias acceder con la entrada, con un tobogan muy divertido ( que probé, claro) y ahí pasamos la tarde.









  Una de las excursiones que hicimos, fué a una zona cercana donde había una grna reserva de flamencos. Era una ruta corta a través de la playa y entre las dunas, toda acotada para preservar la tranquilidad de los animales, pero cada cierta distancia, había miradores que eran como casetas semicerradas donde podíamos contemplarlos. Me gustó mucho.
















  Aquí hicimos una paradita para tomar el vermout.






Y también hicimos algo que yo tenía pendiente, visitar la isla de Tabarca, a solo media horita de Santa Pola.












La isla es muy pequeña pero bien aprovechada. La playa más grande está llena de tumbonas y sombrillas, donde estuvimos todo el día y para los que les gusta las calas, también las hay, pequeñas y con piedras pero con aguas cristalinas.



                                 








     La comida  la hicimos en uno de los restaurantes de la isla que nos recomendaron, La Gloria, y desde luego que merece la pena, por la ubicación (al lado de la playa y en lo alto) con unas vistas fantásticas al mar, mientras comíamos en la terraza, y la comida, de lujo, todo lo que pedimos y todo lo que vimos pasar.










Creo que hay un pequeño museo que ya no nos dió tiempo visitar, y según nos comentaron, los restaurantes solo hacen servicio de comidas, pues cuando se va la última lancha, sobre las 8, la isla se queda medio desierta, solo para los habitantes, lo cual me hace pensar que sería increible poderse quedar a dormir un par de noches en una de las casas.



                                      







  Cuando Tabarca quedó atrás pensé que volvería, porque me encantó.



                              




También hay barcos que hacen la ruta desde Alicante y desde algún otro punto con salida al mar.



Vimos una carrera nocturna, la 10K y me reí mucho pues había gente que corria y a la vez se iban haciendo selfies con el palo... que tiene que haber de todo en esta vida, está claro.....








Otra de las visitas fué Elche, la hicimos en domingo y había un pequeño mercadillo, donde encontré por casualidad, revistas de Pumby, mi héroe de la infancia, no sabeis lo contenta que me puse cuando me compré una.


Visitamos el Palmeral y El Huerto del Cura, que está muy cuidado y es un jardín sorprendente, os lo recomiendo.









Como curiosidad, en el centro de Elche, donde están los museos, nos tomamos un vermout y nos pedimos una caña, cuando nos la sacaron, era más grande que un tubo y venia con tapa de ensaladilla, todo a 1.50 (me hubiese quedado a vivir allí, os lo prometo!)






   Aquel domingo, los museos eran gratuitos y aprovechamos, vimos el arqueológico, que se extiende por y a través del castillo, todo rehabilitado y precioso, unas termas romanas y alguno mas que ya no recuerdo.




   En la oficina de turismo nos pusieron estas gafas de 360 grados, que se veia todo como si estuvieses dentro, una experiencia estupenda.






Una visita estupenda a pesar de los 45 grados que hacía cuando nos marchamos a las tres de la tarde.









También nos acercamos a Villajoyosa y paseamos por su casco antiguo y por la playa que me gustó mucho, incluidas las escaleras mecánicas que tienen para subir desde la playa al pueblo!, menudo lujazo.





En Villajoyosa se encuentra la fábrica de chocolates Valor y por  supuesto que nos acercamos a verla. La visita es gratuita pero hay que coger número, pues entran creo que unas 50 personas, así que si vais a ir consultad los horarios y coged primero el número antes de aparcar.







  Estuvo muy bien, y al final, te ponen un buffet-degustación de 5 o 6 variedades de chocolates ly bombones, y como éramos los últimos y no se llenó el grupo, nos pusimos las botas de chocolates, pues habia para el doble de gente y podías comer lo que quisieses.También compramos, como no, apetecia todo.









La playa de Santa Pola era tranquila en junio y al final, me dió hasta penita cuando nos fuimos.






  




Habia sido una semana completa y estupenda, nos relajamos, nos reimos y disfrutamos en armonia. Se puede pedir más?



Bss