LA HORA DEL  TE

  Creo que fué a raiz de estas galletas donde surgió el nombre del blog.

   Comencé a hacer galletas de todos los tamaños, pero principalmente medianas y grandes. Cada vez eran más grandes, la verdad y cuando invitaba a alguien a tomar cafe, era un problema porque si eran capaces de comerse una entera... creo que nadie podía  repetir, menudo empacho!

   Fué mi hermana Lola, la que me dijo que porqué no hacia pastas más pequeñas, de las que se podían comer en un par de bocados, simplemente por el placer de saborear una buena galleta y la verdad es que me convenció. 

Empecé a comprar cortadores minis que eran monísimos, vestiditos, bodys , setas , elefantes, cebras,corazones,flores,sombreros, biberones.... todos ellos pequeñitos y muy cucos.

   Luego siguió la decoración. Eran como  cuadros ,por su tamaño y el trabajo que llevaban,pequeñas obras de arte (eso cuando salia bien. claro...)

   Las amigas se aficionaron a encargarme  las pastas de té, como comencé a llamarlas en honor de la antigua tradición inglesa  y cada  vez les hacia cosas diferentes, según mis nuevas adquisiciones de cortadores y siempre ,siempre, disfrutaba como una niña haciéndolas.

Me encanta preparar pastas de té, es un vicio para mi y poco a poco se fué convirtiendo en la marca de la casa.

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  Estas fotos que os pongo, son de hace tiempo, pero les tengo un cariño especial, pues así presentaba mis "pastas de té". ¿A que apetece probarlas?

   Os dejo con alguna de ellas, todas viejas amigas, estas por ejemplo, fueron las primeras. Todavía la glasa no me salía bien, pero quedaban preciosas, para tomar con té o con champan...según la ocasión.

   Estas cajas me encantan y la combinación de verde lima con lila es perfecta!.

Estas me gustaron desde el principio, fué un amor a primera vista.

A que parecen recien cogidas?...

               Y aquí os dejo con una de mis cajitas especiales.